Llegó aquel día en que el dinero ya no lo era todo, que también, sino que lo que él quería era poder y reconocimiento.
Equivócate y estás muerto, parecería el título de un thriller de acción, pero no es así. Es un reflejo fiel de la vida misma en el país donde el fracaso empresarial no tiene perdón.
Aunque el virus haya acentuado aspectos clave de los entornos VUCA, afirmar que es el principal causante de toda nuestra incertidumbre sería falso e irresponsable. El mundo globalizado, vaya, lo lleva siendo desde antes de que llegara el COVID-19.
No prestar atención a las nuevas tendencias del sector, ignorarlas, no subirse al barco cuando aún tienes oportunidad y ser superado por la competencia, son errores que se repiten una y otra vez, en todos los tiempos y en todos los lugares.
La Escuela de Guerra del Ejército de Estados Unidos creó el término VUCA: volatilidad, incertidumbre (uncertainty), complejidad y ambigüedad. Como muchos otros términos y expresiones, su significado y contexto ya no son los mismos que en sus orígenes.
En esta serie de artículos vamos a analizar las empresas que no supieron adaptarse, a quienes no gestionaron sus negocios correctamente, las casas que de una forma u otra fracasaron y quedaron relegadas a un segundo plano.
Cuando iniciamos esta serie de artículos pretendíamos desterrar todos esos tópicos que existen de Galicia (o mantenerlos, en caso de ser ciertos, basándonos en datos). Ya conocíamos la Galicia bonita, el Galicia calidade o la Galicia riquiña. Ahora conocemos la Galicia en datos.
Las empresas gallegas cuentan con un buen grado de conectividad y seguridad pero quedan todavía muchas herramientas sin impulsar como el Big Data, el internet de las cosas o el uso de la nube para el almacenamiento.
Guardar los datos que generamos ha sido uno de los retos de los sistemas informáticos. Hacerlo además con garantías de seguridad, lo es todo.
Una vez más, al poner negro sobre blanco las estadísticas nos damos cuenta de que Galicia ostenta un ecosistema empresarial de muchos pocos, donde los pocos muchos son los que contribuyen en mayor proporción al PIB.