Hace hoy trece años, el grande entre los grandes, Steve Jobs, presentaba el producto comercial tecnológico que más ha revolucionado nuestra vida desde la historia de los tiempos: el iPhone.
La tecnología nunca debería ser un fin en sí misma, es decir, el acto de tecnologizar debería tener como objetivo mejorar la calidad de vida de las personas y, como consecuencia, contribuir al desarrollo de la humanidad.
Día Mundial de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información, cuyo objetivo es sensibilizar sobre las ventajas y posibilidades que el uso de Internet y las demás tecnologías de la información y la comunicación, pueden ofrecer a la sociedad y a la economía.
Compañeros de viaje. Hay dos factores clave en la elección de tu compañero o compañeros de viaje: el factor técnico (conocimiento, experiencia, clientes, dinero) y el factor humano (valores, ideales).
Lo importante de esta guerra no es quien la va a ganar o perder, ya que estando seguro de que el ser humano será el triunfador, la cuestión de fondo está centrada en las personas que se quedan en el camino de la indiferencia, la desazón y en el triste anonimato.
El emprendimiento y el entorno. DAFO. El emprendedor deberá analizar el entorno de manera escrupulosa y exhaustiva, ya que de este acto dependerá el éxito.
Si quieres emprender en algún área que te apasiona, que es lo más frecuente, analiza bien y con honestidad si tienes aptitudes para dedicarte a ello o las probabilidades de fracaso aumentarán considerablemente.
El negacionismo tecnológico nos lleva a la aparición de la perniciosa brecha digital que millones y millones de personas sufren ya en todo el mundo.
La tecnología está ayudando a la humanidad a emprender un camino de no retorno. El mundo va a cambiar mucho y la tecnología va a contribuir a hacerlo, pero las debilidades humanas no lo harán tanto.
La tecnología forma parte de nuestras vidas, ahora sí, debemos saber cuándo es necesaria y cuando no lo es tanto. Aunque sí es cierto que, a día de hoy, facilita mucho las cosas.