Era Digital Innovación
ciberseguridad y transformación digital

Ciberseguridad: la transformación digital de la delincuencia

Artículo original de José Antonio Ferreira Dapía, «Ciberseguridad: la transformación digital de la delincuencia», publicado el 18 de diciembre de 2020 en El Diario de Pontevedra.

Como no podría ser de otra manera, los malos, en la mayor parte de las ocasiones, siempre van por delante.

Testigos son la Policía Nacional y la Guardia Civil, que todos los días ven como una parte selecta de los delincuentes van por delante, tanto en pericia para hacer el mal, ya que la imaginación para delinquir no tiene límites, como también en los medios tecnológicos que utilizan.

Sirva como ejemplo que un grupo selecto de ladrones de casas, utilizando un simple inhibidor de frecuencias que en internet costaba en torno a cincuenta dólares, eran capaces de bloquear las alarmas de una manzana entera de chalets adosados.

Esta circunstancia obligó al proveedor del sistema y del servicio de la central receptora de alarmas a “tecnologizarse o morir”.

Otro ejemplo es el hecho de que, tanto en Galicia como en el Estrecho de Gibraltar, las embarcaciones de los narcos tenían más tecnología y potencia que las de nuestras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Dicho todo esto, y aprovechando fundamentalmente su esencia, si nos trasladamos al mundo cibernético pasa tres cuartos de lo mismo.

El IoT y la híper-conectividad de dispositivos, sin duda un enorme avance para crear una capa sensorial para las cosas, una nueva piel para el mundo, tiene su parte negativa, ya que pone en mano de los criminales un enorme agujero para poder realizar sus maldades. En unos casos para sacar réditos económicos, pero en otros casos, y esto es lo que nos debiera preocupar más todavía, por la simple motivación de hacer el mal por el mal.

Esta maldad al cuadrado subyace en no muchas personas, sin embargo son suficientes para sembrar el caos en nuestro planeta.

Un ciber-delincuente podría cambiar los parámetros de nuestro domicilio a su antojo, jaquear el software de gestión de una empresa o modificar la dosis de un diabético que porta una bomba de insulina controlada por bluetooth.

Qué vamos a decir también sobre la ciberseguridad en la conducción autónoma, que se encuentra en pleno desarrollo, y que con la incorporación de 5G, será una realidad inmediata. Que fácil será entonces asesinar a una persona, simplemente bloqueándole el coche en una curva determinada. Esto da pavor.

En el año 2019 hubo 8.914 detenciones e investigados por ciberdelitos solo en España, de los que más de 500 fueron perpetrados por menores de edad.

En España el coste de los ciberataques el año pasado superó los siete millones de euros.

Más del 77% de los ciberataques se producen a empresas, a las que generalmente se les chantajea para restablecer los datos a cambio de dinero. El otro 23% se produce a particulares, con diversos fines.

Hemos incorporado a nuestro lenguaje habitual, términos como phishing, malware o ataque a la web.

Cada empresa española recibe una media de 66 ciberataques de diversa índole cada año.

El gasto en ciberseguridad en el mundo, que se ha ido incrementando notablemente cada año, superó en el 2019, los 144 millones de euros.

Estamos, sin duda, en plena transformación digital, también de la delincuencia, y veremos más pronto que tarde que las pistolas y las navajas del futuro serán smartphones, smartwatches, smartpc´s ,y en general cualquier Smart dispositivo que integre al mundo digital a los criminales.

Pero hay otro tipo de ciberataques que no van dirigidos a los mortales convencionales, es decir, a los que no trabajamos para un servicio de seguridad, de inteligencia o en geopolítica. Se trata de los ataques de países, o bloqueos de países, a otros países.

Sin entrar en detalles, todos hemos leído sobre cómo una nación puede ayudar a un político determinado de otro país a ganar las elecciones a base, por ejemplo, de tecnología de computación, información intoxicada y de intereses espúreos.

En este contexto y con estos datos, podemos decir que la ciberseguridad es un pilar importantísimo de la transformación digital de las empresas y del resto de la humanidad.